Las pernoctaciones caen un -7,6% en la provincia durante 2022 respecto al 2019
La Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de la provincia de Tarragona (FEHT), -la entidad que representa el 90% de las plazas de alojamiento de la provincia- ha presentado los principales indicadores turísticos del año 2022. Así, desde el 1 de enero y hasta el 30 de septiembre, según datos del Tourism Data System del Observatorio de Turismo del Departamento de Innovación Turística de Eurecat, las pernoctaciones en la provincia de Tarragona han disminuido un -7,6 % respecto al mismo período del año 2019 -el último año que el sector turístico pudo trabajar con normalidad-. Sin embargo, la FEHT se ha mostrado optimista por la rápida recuperación del turismo una vez se acabaron las limitaciones a la movilidad provocadas por la pandemia. Así, en total, durante el 2022 se han llevado a cabo en la provincia de Tarragona más de 17,5 millones de pernoctaciones frente a los 19 millones de 2019. En la Costa Daurada, el descenso -comparado con 2019- ha sido del -9,1%, mientras que en las Terres de l’Ebre se han incrementado un +16,5%.
Berta Cabré, presidenta de la FEHT, ha anunciado que «después de los dos peores años de la historia del turismo, el 2022 lo podemos calificar como correcto. Aunque todavía no hemos logrado recuperar los datos de pernoctaciones de 2019, hemos visto cómo, con el final de la pandemia, los visitantes han vuelto a nuestro destino. Para todo el sector era un reto recuperarnos lo más rápidamente posible. Hemos tenido algunas complicaciones como la búsqueda de profesionales o el encarecimiento de costes energéticos y de suministros que, finalmente, harán que las cuentas de explotación no sean tan positivas como necesitábamos». Además, Cabré ha destacado como un punto negativo «la afectación de la guerra en Ucrania, tanto por la falta de visitantes rusos -un mercado líder en la Costa Daurada- y de Europa del Este, como por el aumento de costes energéticos y de suministros que ha comportado”.
Respecto a los diferentes tipos de alojamiento, este año 2022 y respecto al 2019, los hoteles de la demarcación han sufrido una bajada en pernoctaciones del -10,1%, los campings del -5% y los apartamentos del -5,5%. Al respecto, Cabré ha querido recordar que «después de dos años, todos los establecimientos hoteleros, campings y apartamentos han podido abrir sus puertas y ofrecer sus servicios con normalidad». Sin embargo, ha querido recordar que “a principios de año también estuvimos cerrados debido a las dificultades de movimientos para toda la población. Además, el inicio del curso escolar en Cataluña a inicios de septiembre también nos ha restado un par de semanas en las que, habitualmente, muchas familias catalanas hacían sus vacaciones familiares”.
El mercado nacional ha crecido respecto al 2019. El ruso ha desaparecido. El británico bajó un -18,8%, mientras que el irlandés creció un 15%
Los mercados nacional e irlandés han crecido, el británico ha disminuido
Este año 2022, el mercado nacional ha incrementado los datos de la temporada 2019, así las pernoctaciones durante todo el año han crecido un +6,7% respecto a 2019. Cabré ha recordado que “en un año sin Covid tenemos el 50% de turismo nacional y el 50% de internacional, este año ya nos estamos volviendo a acercar con más de un 40% de extranjeros”. Así, por mercados internacionales, comparados con 2019, el francés ha descendido un -1,9%, el británico un -18,8%, el holandés un -7,4%, el alemán un -14,7% y el belga un -1,6%. Mientras que el irlandés ha crecido un +15,0%.
Respecto a lo que queda de temporada turística en la provincia de Tarragona, Cabré ha señalado que «nos encontramos en una situación similar a la de 2019. Algunos hoteles y campings comienzan a cerrar por temporada baja. Los establecimientos que quedan abiertos lo harán con ocupaciones medias, básicamente de turismo senior centroeuropeo, turismo deportivo y eventos”.
El sector turístico sigue comprometido con las mejoras de sus establecimientos y seguirá invirtiendo durante 2023, sobre todo, en sostenibilidad. En 2022 se han invertido 70 millones de euros
Incertidumbre para 2023
Respecto a las expectativas del sector turístico para 2023, ahora mismo, tal y como ha afirmado Cabré, “vemos mucha incertidumbre. Hay muchos factores externos que no nos ayudan a planificar el próximo año”. Algunas de estas circunstancias se encuentran dentro del propio sector, como la fidelización de los profesionales y la labor de prestigiar la profesión”. Sin embargo, Cabré ha señalado que «actualmente, el 90% de nuestras plantillas ya tienen contrato fijo».
Otros factores son externos como las consecuencias de la guerra en Ucrania con el encarecimiento de los precios de la energía y los suministros. Respecto al conflicto bélico, Cabré ha explicado que “no sabemos cuándo podremos volver a recibir a los visitantes rusos, pero el encarecimiento de todos los costes de explotación hace que sea muy complicado establecer los precios y cerrar acuerdos con los touroperadores. Además, somos muy conscientes de que la situación macroeconómica en Europa hará que las familias pierdan poder adquisitivo y, por tanto, puedan destinar menos presupuesto a sus vacaciones y ocio”.
Sin embargo, el sector turístico sigue comprometido en invertir en los establecimientos de alojamiento. Según Cabré, “todas las mejoras van enfocadas a la sostenibilidad y a incrementar los servicios para ofrecer mayor calidad a nuestros visitantes. Durante la pandemia invertimos unos 70 millones de euros; los hoteles 45 MEUR, los campings 20 MEUR y los apartamentos 5 MEUR”.
Cabré ha concluido recordando que «el turismo es el principal motor socioeconómico de la provincia de Tarragona. Generamos un PIB específico turístico y un impacto del 25,70% respecto al total. Además, un 28,5% de los cotizantes a la Seguridad Social corresponden al sector del turismo y la hostelería. Este 2022 hemos comprobado cómo, cuando los visitantes tienen libertad de movimientos, vuelven a casa a disfrutar de nuestras magníficas poblaciones, playas, del interior y de nuestros establecimientos de alojamiento”.
Entre enero y septiembre han pasado por el aeropuerto de Reus un total de 811.412 usuarios. Esta cifra supone una recuperación del 85,9% respecto al mismo período de 2019
El aeropuerto de Reus también inicia la recuperación
Entre enero y septiembre pasaron por el aeropuerto de Reus un total de 811.412 usuarios. Esta cifra supone una recuperación del 85,9% respecto al mismo período de 2019. Se trata de una cifra que, tratada de forma aislada, resulta muy destacada y positiva, pero aún lo es mucho más si se tiene en cuenta el contexto del que partía este inicio de temporada. Una temporada que ha ido precedida por dos años consecutivos de disrupción en los movimientos aéreos a causa de la pandemia, de reducción drástica de vuelos, incluso de desaparición de aerolíneas. Se han añadido en este inicio de la reanudación generalizada la crisis energética, con el aumento de los precios de los carburantes, un contexto bélico y problemas vinculados con la falta de personal y conflictos laborales que también han afectado directamente a las operativas de los aeropuertos. Pese a la incertidumbre sobre la misma evolución de las restricciones vinculadas a la pandemia, a finales de septiembre, se había alcanzado ya casi el 86% del volumen de pasajeros registrados durante el mismo período del año 2019 (un ejercicio excepcional previo a la pandemia).
En términos de recuperación de la actividad, el aeropuerto de Reus ha tenido un excelente comportamiento, el mejor del conjunto de los aeropuertos catalanes. Estos buenos resultados son consecuencia directa de la estrategia de promoción de la Mesa del Aeropuerto, de la que forma parte el Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona. Meritxell Roigé, presidenta del Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona ha asegurado que “no sólo hemos trabajado para posicionar el destino, también hemos intensificado la relación con las compañías y hemos impulsado acuerdos de marketing para conseguir que, a la hora de decidir la apertura o mantenimiento de rutas por parte de las aerolíneas, nuestro aeropuerto fuera una elección interesante, viable y segura. Con el actual contexto de crisis energética y otros condicionantes, las cifras confirman que este objetivo se ha logrado. Sin duda, la recuperación del turismo internacional en la Costa Daurada ha pasado este año por el aeropuerto de Reus”.
El 2023 se plantea con incertidumbre a causa del incremento de los costes energéticos, de suministros y laborales. Al mismo tiempo que la situación macroeconómica en Europa afectará directamente a la capacidad adquisitiva de las familias
